Quirón como regente de Virgo
El tema de las regencias planetarias siempre ha
sido un asunto que ha despertado mucho interés en mí.
Al investigar siempre me encuentro con diferentes propuestas, algunas muy coherentes, otras un poco tiradas por los pelos. Para desarrendar esta madeja, me fui hasta los
textos de Ptolomeo que asigna las regencias de una forma
ordenada basado en los 7 planetas que conocían entonces. Comenzando con las
luminarias asignadas a Cáncer y Leo (Madre y Padre arquetípicos) y de allí en
adelante asignando los planetas en orden ascendente en pares. Queda muy claro
al ver la figura siguiente:
Pero a medida que se han descubierto nuevos
planetas la conciencia humana también se ha expandido haciendo necesario que
cada signo tenga su propio regente. Esos cambios nunca han sido fáciles, de
hecho en la actualidad hay astrólogos que se niegan a utilizar las regencias
modernas, y creo que es el caso de lo que ocurre con la aceptación de Quirón
como regente de Virgo. Simplemente hay un rechazo por miedo a darle paso a lo
nuevo.
Cada vez que se descubre un nuevo planeta, los
astrólogos comienzan a estudiar los fenómenos que ocurren en la tierra y en la
sociedad, y no es que antes estos fenómenos no estuvieran presentes, es que no había la
conciencia, que se despierta o aparece de forma simultánea por aquello de la
ley de correspondencia y la de similitud.
Así Urano fue el primer planeta descubierto
utilizando un telescopio, por allá por 1781, por William Herschel, quien por
cierto era más músico que astrónomo, alrededor de esa fecha ocurrieron , entre
otras cosas, la Revolución Francesa cuyo lema era “libertad, igualdad y
fraternidad”, la Independencia de los Estados Unidos, se impone la física
newtoniana, se desarrollan las primeras teorías científicas sobre el surgimiento
de las especies y la ciencia logra avances que cambiaron el mundo para siempre.
No es difícil encontrar una mayor empatía entre esta nueva energía recién
descubierta y el rebelde, innovador, reformista y humanista Acuario que con
Saturno el que impone los límites y las restricciones.
A Neptuno lo descubren en Septiembre de 1846,
pero para ese momento ya otro astrónomo lo había visto, sin verlo dos veces
anteriores, sin contar que hay dibujos de Galileo de 1600 y algo que ya
apuntaban a la existencia del planeta; justo ese año Morton inventa la
anestesia, se identifican a los microorganismos como causantes de las
enfermedades infeccionas y se comienza a hablar de sistemas de salud pública, un
poco antes se inventa la fotografía, en Europa el nacimiento de las democracias
desplaza a las monarquías absolutas, es el período del posromanticismo, de los
poetas malditos y del movimiento Decadentista; un poco más tarde se desata la
guerra del opio entre China e Inglaterra. Tampoco era difícil asociar el
ablandamiento de las estructuras, la búsqueda de valores espirituales y el
desarrollo de la creatividad y la sensibilidad con el compasivo y escurridizo Piscis,
hasta ese momento regido por el benefactor Júpiter pero más asociado con los
espacios abiertos y la expansión de nuestros límites.
Plutón es uno de los más controversiales. Fue
descubierto en 1930 y su órbita es tan irregular que en el 2006 lo degradaron a
planetoide. Pasa 20 de los 248 años que tarda en recorrerla más cerca del sol
que de Neptuno y puede transitar por la órbita de éste último hasta por 10
años. En esta época destacan, entre otras cosas, una gran cantidad de guerras y
revoluciones en todo el planeta, el descubrimiento de la energía atómica con la
consiguiente invención de armas
nucleares, el nacimiento del psicoanálisis que empieza a explorar las
profundidades del inconsciente, se inventa la penicilina, cambios importantes
en el mapa político del mundo. Eventos que nos hacen ver la similitud con el
radical y transformador signo de Escorpio.
Nos quedan 4 signos con regencia compartida.
Géminis y Virgo compartiendo a Mercurio y Tauro y Libra compartiendo a Venus.
Quirón es un asteroide descubierto en 1977, con
una órbita extraordinaria, localizado entre Saturno y Urano, pero lo que lo
hace especial es que, aunque es un cuerpo muy pequeño, es muy lento, mantiene
su espacio y se comporta como un planeta. Para el momento de su descubrimiento
hay un interés masivo por los temas de la vida y la muerte, en USA la doctora
Elizabeth Kubbler organiza seminarios para prepararse a morir sin miedo, que
atraen a grandes cantidades de personas, el Dr. Kervorkian adopta su postura
con respecto a la eutanasia que lo lleva posteriormente a “ayudar” a morir a
personas con enfermedades terminales, al mismo tiempo hay un surgimiento importante
de infinidad de métodos curativos relacionados con la mano, como el reiki, la quiropráctica,
quiroterápia, yuki, etc) y se establece un vínculo entre lo que ingerimos y
nuestra salud, dando paso a movimientos de mayor conciencia sobre alimentación,
medicina natural etc.
Géminis es el signo del aprendizaje, de los
procesos mentales y del lenguaje, obtiene la información a través de la
colección de datos que integra en su memoria. Virgo lo hace a través de la puesta
en práctica, además recolecta sólo lo que es útil, no le gusta perder el tiempo
en aquello que no le sirve para conseguir la perfección, no me es difícil
encontrar una gran cantidad de similitudes entre el sanador herido y el signo
de Virgo y en mi humilde experiencia, al analizar este signo veo a Quirón como
su regente, sin quitarle el ojo a Mercurio y con más frecuencia, sobre todo al
trabajar con direcciones o progresiones, es más frecuente encontrar a Quirón
involucrado en sucesos virginianos que a Mercurio.
Para mí el descubrimiento de Quirón, nos ofrece
la posibilidad de aprender desde cero la influencia de un cuerpo recién
descubierto, no tenemos información histórica a la que echar mano y sólo una
actitud de apertura nos permitirá llegar a conclusiones contundentes. Como toda
ciencia que trata con la vida, debe ser capaz de evolucionar junto con los
sujetos de estudio.
Falta ver quién va a llevar la regencia de
Tauro, hay ya algunos astrólogos que proponen a Ceres, hasta ahora no lo he
experimentado, más por desconocimiento que por otra cosa, pero en cualquier
momento lo incluyo en mis cartas y empiezo a experimentar.